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El juego y el arte de la miniatura en el Museo del Estanquillo

“El detective de las miniaturas” así llamó la periodista Ángeles Vázquez a Carlos Monsiváis en 1993, debido a la valoración que hizo de la obra de artistas como Roberto Ruiz, Teresa Nava y del matrimonio integrado por Teodoro Torres y Susana Navarro. Nombres que resultan familiares para quienes visitan con frecuencia el Museo del Estanquillo y cuyo trabajo se puede apreciar en esta exposición al lado del de otros autores que el escritor también admiraba. Es importante destacar que las 250 piezas que conforman la muestra se exhiben por primera vez.

Debido a la enorme fascinación que el cronista sentía por las miniaturas, el también reconocido coleccionista Ricardo Pérez Escamilla, dijo: “Carlos Monsiváis tiene sus gatos y tiene sus miniaturas. Ya quedó claro, ¿Verdad?”. La frase parecería exagerada si se observa todo el acervo que el escritor constituyó y que se ha explorado en las exposiciones del museo. Si hablamos de números, fotografía, gráfica y caricatura conforman las colecciones más numerosas. Sin embargo, Escamilla quería enfatizar la relación que el cronista entabló con la miniatura, que se podría calificar como cariñosa y juguetona (entrañablemente documentada por la fotógrafa Graciela Iturbide). Dicha actitud se tomó muy en cuenta en esta curaduría para incluir otro tipo de objetos que tienen un carácter lúdico, como son los títeres (varios de ellos de la reconocida Compañía Rosete Aranda), los libros de pequeño formato de Saturnino Calleja y los escenarios móviles de cuerda del tapatío Luis Ascanio Zenteno, artista poco conocido a quien Monsiváis consideró “creador de primer orden”.

La miniatura constituye una parte sustancial del acervo de Carlos Monsiváis. Tan sólo las piezas de los artistas arriba mencionados suman más de mil, y habría que añadir las de otros autores como Alfredo Velázquez Lona, Guillermo Romero Amador y Gratierr, Eduardo Oliva Arias, Hipólito Vázquez Sánchez y Arturo Carrillo Campos. La muestra enfatiza las particularidades de estas creaciones, que fueron tan apreciadas por su coleccionista.

El montaje está dividido en los siguientes temas: representaciones de la muerte; Don Juan Tenorio, los títeres y el teatro; cuentos infantiles y personajes literarios; escenas y protagonistas de la historia de México; para finalizar con la vida cotidiana, tipos populares, tradiciones y creencias. Todos ellos tópicos recurrentes tanto en la obra, como en la colección de Carlos Monsiváis.

Ana Catalina Valenzuela